"En 1923, un grupo de cartógrafos ingleses estaba midiendo una zona casi inaccesible del continente africano. Al final de un duro día, ansiosos de volver al campamento base, los cartógrafos notaron que aún faltaba medir una pequeña colina. Uno de ellos, el más imaginativo, propuso que terminaran el trabajo más tarde, de regreso al campamento. Su sugerencia fue aprobada.

Armado de un par de tijeras, el cartógrafo recortó el dibujo de un elefante, trazó su contorno en el mapa, y completó así la colina cuyas medidas nunca fueron tomadas. El monte en forma de paquidermo puede verse aún hoy en el ángulo noroeste de la página 17 de la serie cartográfica 1:62.500 publicada por el Real Instituto Geográfico Británico bajo el título África: Costa de Oro."

ALBERTO MANGUEL. Guía de lugares imaginarios (1992).